El padre José Ramírez de visita en la iglesia San Pedro eleva el Santísimo Sacramento durante una misa de sanación y liberación el 16 de abril. (Fotos Lorena Rojas/San Francisco Católico).
20 de abril 2021
Lorena Rojas
La Jornada de Evangelización organizada por el grupo Carismático Católico de las parroquias de la Misión en San Francisco había sido planeada para abril de 2020 pero la pandemia la paró. Un año después, el 16 y 17 de abril de 2021 se hizo realidad esa experiencia de fe para los parroquianos de las iglesias San Pedro, San Antonio y San Carlos.
La jornada comenzó con una misa de sanación y liberación el viernes 16 en la iglesia San Pedro y el sábado 17 se ofreció un retiro eucarístico en la iglesia San Antonio. El evento terminó con una misa de adoración en la iglesia San Pedro el mismo sábado.
El principal predicador y celebrante de la jornada fue el padre José Ramírez, (conocido internacionalmente como padre Joselito) quien sirvió en Nicaragua por más de 20 años hasta abril de 2020 cuando fue trasladado a la ciudad de Querétaro en México donde se encuentra la sede provincial de su congregación.
Es un sacerdote de la orden Terciario Capuchino de Nuestra Señora de los Dolores, a los sacerdotes de esta congregación se les conoce como amigonianos, quien fue invitado a dirigir el congreso en las parroquias de la Misión por miembros de la Renovación Carismática Católica de estas iglesias.
El carisma del padre Ramírez en la oración de intercesión por la liberación y la sanación de las personas, fue lo que motivó a los líderes carismáticos de las iglesias de la Misión a invitarlo.
El padre Ramírez dijo al San Francisco Católico que el mensaje de su predicación durante esta Jornada de Evangelización es hacer un llamado a la oración para que las personas de fe puedan discernir entre el espíritu del bien y el espíritu del mal y tengan la certeza de que el espíritu del bien siempre vence al mal, aseguró.
Para tener esta certeza hay que obedecer a Dios primero que a los hombres. Él dijo que si las personas confían en Dios, se animan a regresar a los servicios religiosos en las iglesias respetando las medidas de seguridad, sobre todo ahora que se permite más fieles en el interior de las iglesias, dijo.
“Lo presencial es necesario, debemos vencer el miedo para que la Iglesia recupere la feligresía”, dijo. Se alegró al ver el grupo numeroso de parroquianos en la misa de sanación en San Pedro, sin embargo señaló que algunos ya no quieren volver a las iglesias.
Durante la homilía, el padre Ramírez insistió en que es importante y necesario vivir la Eucaristía de forma presencial, con toda el alma. Agregó que muchos fieles se han alejado de las iglesias y se han “acomodado a lo virtual”.
Por otra parte, manifestó que ha visto a otros fieles tan necesitados de los sacramentos que durante la Cuaresma de este año en tres días confesó a más de 200 personas.
El segundo día de la Jornada de Evangelización, cuando tuvo lugar el retiro eucarístico en la iglesia San Pedro, el padre Ramírez enfocó su mensaje en la oración como el mejor recurso para mantener saludable la vida espiritual en estos tiempos difíciles, y así poder responder a los signos de los tiempos. La Jornada de Evangelización terminó con una misa de adoración.
El presidente de la Renovación Carismática Católica Hispana de la Arquidiócesis de San Francisco, Alejandro Galo, dijo que invitaron al padre Ramírez a dirigir esta jornada para ayudar a las personas que están sufriendo por las secuelas de la pandemia.
“Este sacerdote es un ungido, él dedica mucho tiempo a la oración”, dijo Galo. Agregó que por ese don del padre Ramírez fue que en la noche de sanación y liberación del viernes, durante la procesión con el Santísimo se vieron muchas manifestaciones de liberación de personas que están sufriendo angustia por las heridas que les ha dejado el COVID-19 y por otros problemas”, detalló.
Agregó que los parroquianos todavía tienen mucho miedo de congregarse en grupos grandes, aunque para este evento garantizaron la seguridad sanitaria a los asistentes, siguieron las medidas de las últimas reglas emitidas por las autoridades de salud sobre el distanciamiento, uso de máscara, desinfección de manos, control de temperatura y el número de personas permitido en interiores.
Maritza Rosales, una vecina del distrito de la Misión, fue a la misa de sanación y liberación porque había conocido al padre Ramírez allá en su natal Nicaragua y porque conoce acerca del carisma de este sacerdote. Ella quiso aprovechar ese momento para pedir a Dios por el fin de la pandemia, y para que su fe se mantenga firme.
Al ver a los fieles que asistieron a la misa de sanación dijo, “En verdad los carismáticos ya necesitaban tener un encuentro como este, es lo que necesitamos. Durante la misa de sanación, se sintió la presencia de Dios, me sentí feliz de estar ahí y ver a tantas personas tan contentas”.
Durante el retiro eucarístico del sábado 17, el padre Moisés Agudo, párroco de estas tres iglesias de la Misión, dirigió un mensaje a los fieles motivándolos a confiar en Jesús resucitado y también administró la bendición a sus parroquianos tanto a los presentes como a quienes participaron a través de la trasmisión virtual.