Marzo 10, 2019
EL PASO, Texas – Los obispos de Texas y México pidieron solidaridad con los migrantes como una respuesta católica a la emergencia nacional declarada en la frontera de EE. UU. y México. También cuestionaron si la emergencia, declarada por el presidente de Estados Unidos, Donald Trump para liberar fondos para construir un muro fronterizo, era tan urgente como lo es atender a las oleadas de inmigrantes que buscan asilo en los Estados Unidos, pero que se ven obligados a esperar meses para hacer sus reclamaciones. “Nuestra nación, Estados Unidos, ha expresado que se encuentra en una emergencia nacional. ... Fuimos a la frontera ayer. La emergencia no está aquí”, dijo el arzobispo Gustavo García-Siller, de San Antonio, el 27 de febrero al cierre de una reunión de obispos fronterizos sobre temas de inmigración. “La emergencia es lo que está pasando la gente para tratar de venir aquí para tener paz, tener comprensión, respeto y una bienvenida genuina. Toda la retórica que se ha estado acumulando sobre lo malos que son las ‘otras’ personas se ha construido con este estado de emergencia nacional, que es una mentira”, agregó el arzobispo García-Siller. “La emergencia es cómo vamos a cuidar de los discriminados y los desfavorecidos”.