El obispo Alexander K. Sample, de Portland, Oregón, ora durante la manifestación provida en el Cívic Center en San
Francisco, el 25 de enero. (Foto Dennis callahan/San
Francisco Católico).
6 de febrero de 2020
Lorena Rojas
La 16ª Caminata por la Vida de la Costa Oeste, que tuvo lugar en San Francisco el 25 de enero reunió a
miles de activistas provida en su mayoría jóvenes. El movimiento recibe el apoyo de diferentes
denominaciones religiosas entre ellas de la Iglesia Católica, que cada año celebra una vigilia la víspera de la
marcha y una misa en la catedral el propio día antes de la caminata.
La misa por la vida del sábado 25 de enero llenó la catedral Santa María de la Asunción en San Francisco
donde participaron miles de fieles, en su mayoría jóvenes de las escuelas católicas y también estudiantes
de colegios y universidades públicas y privadas.
Durante la homilía en la catedral, el arzobispo de Portland, Oregón, Alexander K. Sample, quien presidió la
liturgia, llamó a los jóvenes a defender la vida en todo lugar donde se encuentren.
“Ustedes son la esperanza del futuro, no desestimen eso. Ustedes tienen que cambiar el mundo”, pues la
luz de la verdad del Evangelio tiene que brillar en la oscuridad en donde se produce el aborto, les dijo
directamente a los jóvenes reunidos en la catedral antes de salir a caminar la Marcha por la Vida de la
Costa Oeste.
El llamado no excluyó a los adultos. El arzobispo continuó en su homilía: “Todos aquí reunidos en esta
catedral tenemos que ser testigos de la vida en un mundo de muerte”. Se refirió a la vida como un regalo
de Dios que se tiene que respetar desde la concepción hasta la muerte natural.
Oró por quienes “han aceptado la tragedia del aborto”.
La cultura provida se siembra en el hogar y se cultiva ahí mismo, explicó Ofelia Carrillo una feligresa de la
Iglesia San Francisco de Asís de East Palo Alto. “A mi hija (Sofia de 10 años) yo la he traído desde chiquita,
desde que tenía 5 años para que vaya aprendiendo el significado de la vida”, dijo al San Francisco Católico.
Carrillo comentó que ella le habla a su hija sobre las consecuencias de tener sexo. Le habla a la niña como
lo hizo con los otros hijos que ahora son adultos y como lo hizo su papá con ella.
“Yo le digo que cuando esté grande y lista para tener sexo es porque ya planeó tener un bebé, comentó.
El don de la vida es un derecho que solo le corresponde a Dios, aseguró Miguel Hernández un parroquiano
de Santa Isabela en San Rafael. Él se unió al grupo de Nuestra Señora de Loreto que viajó en dos autobuses
llenos de activistas provida.
Hernández participó por primera vez en la Caminata por la Vida de Costa Oeste. Como hombre, él hizo un
llamado a otros hombres para que piensen que si a ellos mismos les dieron la oportunidad de nacer, que
ellos apoyen a la mujer para que dé vida a un hijo que está en el vientre, dijo.
En la plaza del Centro Cívico en San Francisco, antes de la caminata se presentaron testimonios y oradores
provida hablando sobre el mal del aborto.
Entre ellos el padre Frank Pavone de Sacerdotes por la Vida, dijo que algunos jueces de la Corte Suprema
están considerando la posibilidad de si la Corte puede cambiar la ley que ha estado por 50 años (Roe V.
Wade). “Sí se puede”, aseguró el padre Pavone.
Él explicó que la razón por la cual si se puede cambiar la ley sobre el aborto es porque “las circunstancias
han cambiado y porque los jueves ahora tienen más información de lo dañino que es el aborto”.
Agregó “que también ha cambiado porque la ciencia médica ha cambiado, porque en el momento que se
aprobó Roe V. Wade, inclusive no se usaban el ultrasonidos, y la corte dijo nosotros no sabemos cuándo
comienza una vida”, dijo el padre Pavone.
Si hoy en el 2020, no saben cuándo la vida comienza… Eso es biología básica, dijo el padre Pavone. ¡Si!
Nosotros sabemos exactamente cuándo una vida humana comienza, sabemos exactamente cómo
comienza, sabemos si es masculino o femenino y que determina el color de los ojos...”, dijo
“Un estudiante de biología de séptimo grado lo sabe” hoy día, afirmó el padre Pavone.