4 de marzo
Lorena Rojas
San Francisco Católico
Un día después del Miércoles de Ceniza los delegados del V Encuentro de Pastoral Hispana, representantes de las iglesias con servicios religiosos en español en la Arquidiócesis de San Francisco participaron en un evento de preparación para la Cuaresma, el cual incluyó pláticas sobre los signos y símbolos de este tiempo litúrgico y el asunto de la conversión personal entre otros temas.
A muchos de los delegados esta formación, en la Cuaresma, les hace muy bien para alimentarse espiritualmente y continuar el servicio que ofrecen en diferentes ministerios pastorales o grupos parroquiales.
La reflexión de Cuaresma fue dirigida vía Zoom por el padre jesuita Edwin Martínez Callejas, estudiante de un doctorado en la Universidad de San Francisco (USF), quien resaltó varios elementos propios del tiempo de Cuaresma comenzando con la imposición de las cenizas el Miércoles de Ceniza.
Él explicó el elemento de las cenizas como un símbolo y signo que menciona la Biblia y que usa la Iglesia Católica para hacer visible lo invisible, por ejemplo el arrepentimiento.
Uno de los pasajes bíblicos que hace alusión a las cenizas y al arrepentimiento es el relato de David, al reconocer el pecado cometido contra Urías y su esposa, explicó el padre Martínez.
Agregó que el rey David roció cenizas en su cuerpo como demostración de arrepentimiento, luego entró en un período de penitencia de 40 días, número que simboliza el proceso de su conversión.
El número 40 en la Biblia no es un tiempo cronológico sino un período que significa “tiempo de Dios”, dijo.
A la Cuaresma se le conoce como tiempo de Dios, porque es un periodo de reflexión y trabajo interior de cada persona, en el camino hacía la Pascua de la Resurrección que es el tiempo máximo en la vida de un cristiano.
También se refirió a los tres pilares de la Cuaresma: Oración, ayuno y caridad o limosna, temas citados en las lecturas a lo largo de la Cuaresma desde el Miércoles de Ceniza hasta el final de este tiempo litúrgico.
El padre Martínez explicó que los cristianos cada año van redefiniendo la Cuaresma. Redefinir, no significa cambiar el significado de la Cuaresma, más bien vivirla desde los diferentes contextos y realidades, por ejemplo una persona puede tener diferentes necesidades este año de las que tuvo durante la Cuaresma del año anterior, diferentes comportamientos que cambiar o diferentes sacrificios que realizar. Lo que es un sacrificio para una persona, quizá no lo sea para otra dependiendo de las circunstancias, explicó.
“Para muchos que ya lograron superar algo en el camino de sus vidas, por el ejemplo el egoísmo, este año la necesidad de cambio puede ser otra, como superar una adicción”, ejemplificó el padre Martínez.
La hermana Estela Martínez coordinadora del grupo de V Encuentro en la Arquidiócesis de San Francisco y asociada pastoral en la iglesia del Naufragio de San Pablo, dijo que la Cuaresma es un tiempo litúrgico para hacer un alto en el camino y pensar en qué es lo que Dios nos está pidiendo, “para mí la Cuaresma siempre tiene este reto personal, de reflexionar que tipo de cristiana soy”.
Desde esta reflexión cuaresmal, la hermana Martínez comparte que el V Encuentro ha sido en la Arquidiócesis un respiro tanto para los delegados que se alimentan espiritualmente como para los ministerios que ellos representan en sus parroquias.
A pesar de la pandemia, en el V Encuentro nos hemos mantenido fortaleciéndonos con buenos conferencistas que nos han hablado sobre diferentes temas, entre ellos la justicia social de la Iglesia y la migración, entre otros asuntos.
Ella lamentó que algunos de los delegados se han enfermado por COVID-19, otros han perdido familiares y amigos por el mismo virus.
Vicente Cortés, delegado del V Encuentro en representación de la iglesia Todos los Santos en San Francisco y miembro de la Pastoral Familiar Arquidiocesana dijo que temas como la reflexión sobre la Cuaresma son enseñanzas que se pueden compartir en los grupos pastorales.
Agregó que los líderes de su ministerio Pastoral Familiar, van a compartir esta reflexión de Cuaresma en su grupo la próxima reunión en este mes de marzo.